Mariano Rajoy recibía en Moncloa a Pedro Sánchez (ambos en la imagen). El líder socialista, en el mejor estilo Barack Obama, el chulo de Chicago, le daba palmadita a Rajoy y le animaba a entrar en Moncloa. Eso lo hace el anfitrión, Sánchez, tío vulgar, no el recibido. Y para ser exacto, la palmadita no debía darla ni el uno ni el otro. Cuando hablamos de 'chulería Obama' no sólo nos referimos a Barack sino también a su esposa Michelle, esa gran mujer que agarraba por el hombro a la reina de Inglaterra o abroncaba al Rey de España, Juan Carlos I en Marivent. Usted no es una líder señora; usted es una maleducada. Como su esposo, como Pedro Sánchez. Hispanidad redaccion@hispanidad.com