Tras repetirnos lo de 'nosotros y nosotras" (que no doña Irene, que usted nunca será 'nosotros'), la portavoz parlamentaria de Podemos estuvo en un tris de confeccionar un nuevo palabro feministo: las 'militantas'. Pero se contuvo a tiempo y se conformó con la reiteración, asimismo pedantona de  "los militantes y las militantes". ¡Qué pena! Algunos ya esperábamos a las militantes, que rima con tunantas, pero doña Irene se contuvo a tiempo, no fuera a superar una nueva barrera del ridículus espantosus'. Pero no lo duden, doña Irene cruzará esa frontera. Antes o después. Ningún fascista podrá detenerla. Hispanidad redaccion@hispanidad.com