Lo cuenta, cómo no, Religión en libertad. Este no me gusta, que me lo cambien por otro. O no quería dos, me quedo con uno y descarto al otro. Es lo que no se cuenta de algo tan inhumano como los vientres de alquiler.

Por cierto, el partidario más entusiasta de la maternidad subrogada es un partido de derechas: Ciudadanos.