Ante una salvajada como la de Laura Luelmo, ¿es "infame" hablar de endurecer las penas a asesinos y violadores? Según las feministas de Podemos y del PSOE, sí.

El miércoles se vivió en el Congreso una de esas sesiones para el ‘estupidiario’, protagonizado por dos feministas de pro: Ione Belarra y Carmen Calvo, con dos monaguillos, de comparsas: Pedro Sánchez y Pablo Iglesias. La víctima, Pablo Casado.

Belarra calificó de “infame” a Casado porque “no queremos pistoleros… leyes para que no nos maten”. Pues oiga, las leyes no evitan los asesinatos ni las violaciones, los pistoleros sí. Pero, en cualquier caso, no existen leyes para evitar el delito sino para reprimirlo y, si son duras, que sirvan de escarmiento para futuros delincuentes.  

Y luego llegó, cómo no, ella, doña Carmen Calvo, la más feministas de todas las feministas, para arremeter contra la derecha machista y felicitar a la podemita majadera por su defensa de las mujeres, mientras el feministo Pablo Iglesias y el feministo Pedro Sánchez aplaudían o meneaban la cabeza en señal de asentimientos.

Sin comentarios.

A continuación, docenas de tertulianos feministos hicieron realidad aquello de que todavía hay algo más tonto que un obrero de derechas: un varón feminista y han vuelto a repetir lo lamentable que resulta por parte de Pablo Casado utilizar la salvajada perpetrada contra Laura Luelmo con móviles políticos.

Oigan, aquí los únicos que han utilizado a Laura Luelmo como objetivo político han sido las muy feministas Ione Belarra y Carmen Calvo.

Pero el infame es Pablo Casado.