El acompañamiento y asistencia de personas con discapacidad o dependientes es una de las excepciones que se añadieron al real decreto del estado de alarma el pasado 17 de marzo. A pesar de ello, los casos de acoso desde las ventanas son cada vez más frecuentes, algo que también sufren el personal sanitario y otros trabajadores.

Durante estos días de confinamiento, además de familiares de personas dependientes, médicos, enfermeras, técnicos de laboratorio, cajeras de supermercado, y hasta personal del servicio de limpieza, que no tienen otra opción que seguir asistiendo a sus puestos de trabajo, han mostrado su enfado en Twitter por esta “policía de balcón” que se toma la justicia por su mano. En algunos casos, además de sufrir insultos, les han arrojado huevos o salivazos.

Sánchez, te lo has buscado tú.