Un fiscal independiente es como un círculo cuadrado. Tenemos un problema. Los fiscales se dicen independientes. Independientes de criterio para aplicar la ley, ciertamente, pero no independientes orgánicamente: dependen del gobierno de turno, y el asunto no es si pueden enfrenarse al gobierno de turno, porque lo que tiene que hacer es obedecerle. Son los encargados de hacer cumplir la ley y de defender a la generalidad, representada por el Estado, cuando alguien ataca a esa generalidad. Por eso, no es extraño que en algunos países, al ministro de Justicia se le denomine fiscal general del Estado. En plata, claro que el Gobierno manda en los fiscales, aunque por higiene democrática debe dejarle hacer cuando el fiscal investiga a un miembro del Gobierno. No son abogados del Estado pero sí dependen del Gobierno. La Unión Progresista de Fiscales no se ha enterado de que una fiscal independiente es como un círculo cuadrado. Hispanidad redaccion@hispanidad.com