El 13 de mayo de 1917 se inician las apariciones de la Virgen María en Fátima. Con ella se inicia el comienzo del fin de la era moderna. El panorama que en Portugal planteó la Virgen María se ha ido cumpliendo de forma inexorable y solo puede resumirse, con la evolución del cristianismo durante toda la modernidad, con la siguiente leyenda: de derrota en derrota hasta la victoria final.

La clave de esta etapa final de la modernidad es la Eucaristía. Todas las crisis eclesiales y ‘ laicas’ empiezan o acaban en la falta de fe en la Eucaristía, haciendo carne aquellas palabras San Juan Pablo II: "la Iglesia vive de Eucaristía". 

Así que en esta época cobran especial preponderancia las fiestas destinadas al Santísimo Sacramento o los santos ligados al misterio eucarístico. Por ejemplo, San Pascual Bailón, cuya festividad se celebra el próximo jueves 17 de mayo.