Hasta ahora, nos enfrentábamos a un gran misterio…¿Por qué desapareció la cotorra de Carolina… (América del Norte)?

Entre las hipótesis, la destrucción de su hábitat o la caza intensiva para obtener sus llamativas plumas verdes, amarillas y naranjas, que eran empleadas como decoración de sombreros. Pero también la exposición a patógenos de las aves de corral. Nunca estuvo claro.

Ahora, un equipo internacional dirigido por Carles Lalueza-Fox, del Instituto de Biología Evolutiva (IBE) en Barcelona, ha descifrado el enigma: la cotorra de Carolina desapareció a principios del siglo XX de forma abrupta por culpa del hombre, -la humanidad siempre tiene la culpa- según revela su ADN.

Para mapear el genoma completo del ave extinta, tuvieron que secuenciar primero el genoma de un pariente vivo cercano -no sabemos si sería la tía o la prima de la cotorra de Carolina-, la cotorrita del sol de América del Sur (Aratinga solstitialis).

Ahora, los expertos se preguntan si sería posible devolver la cotorra de Carolina a la vida. Lo que se dice una técnica Parque Jurásico en estado puro.