Esto sí que es un estado de alarma: Los profesionales de la veterinaria han detectado que las mascotas están engordando sin control durante el confinamiento, incluso hasta un 10%, y recomiendan vigilar su peso y controlar su alimentación. 

Desde el 13 de marzo los perros pueden salir a la calle pero solo lo imprescindible, se acabaron paseos largos, juegos con otros perros o visitas a espacios donde pueden corretear sueltos. Sus rutinas son diferentes, ahora nada es como antes. Pero estos hábitos más sedentarios no son las verdaderas causas de que la obesidad les aceche. Los culpables, según los expertos, somos nosotros: les damos más comida porque así interaccionamos más con ellos, en un momento que todos estamos las 24 horas en casa. Porque ya se sabe que los perros, no son solo nuestras mascotas, son nuestros compañeros. Y en estos moments de confinamiento, más que nunca, pueden convertirse en los mejores amigos. 

¿Cómo evitar tal descontrol canino?: los expertos recomiendan desde darles más veces de comer al día pero con menos cantidades de alimento, hasta practicar ejercicios de obediencia pasando por reducir los premios en forma de chuches o más pienso, que se les concedan a las mascotas.