Ok, el glaciar islandés que hace un siglo ocupaba 38 kilómetros, ha exhalado su último aliento y, así, ha terminado por derretirse del todo.

Islandeses: el glaciar ha muerto, anuncian los científicos, dispuestos a organizar un funeral a la que fue una gigantesca masa de hielo. En su memoria, colocarán una placa para concienciar al mundo de lo que se le viene encima: Ok es el primero del país, pero le pueden seguir otros 400 más. Una auténtica masacre, no causada por el hombre, como sí pregonan, entre otras, Naciones Unidas.

Hay quienes lamentan hoy su pérdida, mientras otros lo declaraban muerto en 2014. Ya entonces era un glaciar que no fluía y, según los expertos, poco se puede hacer por un glaciar que no fluye, pues está muerto. No obstante, esto no va a quedar así. Ok, no te olvidamos y, por ello, se grabará una película como homenaje, bajo el título 'No está bien'.