Elon Musk, uno de los fundadores y actual presidente de Tesla, la ha vuelto a liar, cabreando al supervisor de los mercados estadounidenses (la SEC). El hecho no es una tontería y podría tener graves consecuencias, así que cabe preguntarse si se habría fumado un porro antes de tuitear… no sería el primero, pues ya lo hizo durante una entrevista en la radio.

El excéntrico empresario ha roto el acuerdo firmado en septiembre, que le prohibía escribir en Twitter sin supervisión de la empresa. Ahora citando cifras de producción de vehículos… Y la SEC no lo ha dejado pasar: ha pedido a un juez que dictamine si Musk actuó en rebeldía, criticando que “una vez más, publica información y material inadecuado sobre Tesla a sus 24 millones de seguidores en Twitter”. Pero ojo, porque el gran innovador de Musk se juega la presidencia de la compañía de coches eléctricos.