El 25 de agosto, festividad de Santiago Apóstol, patrón de España, era día laboral en casi toda España. Y SM el Rey Felipe VI no acudió a Santiago de Compostela a hacer la ofrenda. ¿Verdad que algo falla?
Luego nos quejaremos de que haya separatismos. Para mí, que también hay separadores… sobre todo separadores de España y de la fe cristiana.

A Felipe VI habría que recordarle lo de Voltaire: me siento incapaz de gobernar a un pueblo de ateos. Y era Voltaire.