Se equivoca El País cuando aconsejó tener menos hijos para afrontar el cambio climático. Además, muchos estamos convencidos de que a algunos no les hace falta esas razones climáticas para matar al niño. La cosa es sencilla.  Si para combatir el cambio climático sobramos muchos lo relevante no es abortar sino suicidarse. Janli, suicídate ya mismo, para dar buen ejemplo (en la imagen). O sea, el control de mortalidad: no matéis bebés: lo que hay que hacer es enviar al otro barrio con una muerte dulce y muy digna -que conste- a todo aquel ente improductivo y cobrador de pensión. Ejemplo: en España hay 9,5 millones de pensionistas. Si acabamos con ellos, no sólo aliviaríamos las cuentas públicas sino que, además, conseguiríamos reducir de facto los gases de efecto invernadero. Todo sea por -y contra- el cambio climático. Janli: suicídate ya. Consumes demasiado oxígeno. Hispanidad redaccion@hispanidad.com