Sigan a Federico Sáenz de Santamaría, un especulador financiero inteligente, con dinero propio, eso sí, que sabe lo que se dice y lo que se escribe. En esta ocasión nos está pidiendo que no nos obsesionemos con Grecia y miremos a otros mercado más grandes, es decir, que pueden hacer mucho más daño. Por ejemplo, el chino. El Índice Shanghai ha caído un 30% en tres semanas, y el mercado griego, comparado con el chino, es una minucia. Hispanidad redaccion@hispanidad.com