Resulta paradójico que todos los partidos se hayan puesto de acuerdo, sí, han leído bien. El pasado miércoles, por unanimidad, pidieron en el Senado que la Semana Santa sea Patrimonio Cultural Inmaterial de la Unesco. ¡Lo que resulta aún más increíble!

Esta petición se debatió a iniciativa del PP y nos lleva a preguntarnos: ¿Se trata de un 'gran favor' hacia los cristianos? ¿Busca el partido de Rajoy contentar un poco al voto católico, que tanto ha despreciado? ¿Es una treta para marcar aún más distancias con Podemos, que llegó a cuestionar esta celebración religiosa?

A veces con los políticos no se sabe qué buscan, pero no se hagan ilusiones, sobre todo, los cristianos, porque lo único que piden es que la Semana Santa tenga la misma consideración que otros bienes inmateriales, como el flamenco, la dieta mediterránea, la cetrería, la jota, los toques de campanas o la improvisación oral, entre otros ejemplos que dio la 'vice' el pasado mes de octubre.

Sin embargo, la Semana Santa es mucho más importante, son los días en los que se conmemora la pasión, muerte y resurrección del Señor, pero claro eso, desgraciadamente, a la mayoría de políticos les importa muy poco, por no decir nada. A ellos les gusta más hacer el paripé, apostar por la forma y dejar de lado el contenido.

Hispanidad

redaccion@hispanidad.com