Jordi Évole entrevistaba, en La Sexta, a Pedro Sánchez. Más que una entrevista fueron una palmaditas en el hombro, animando al rebelde a cargarse lo que queda del PSOE. La Sexta es así; cuando atacan, atacan de verdad, cuando alaban, la mermelada  rebosa por cámaras y micrófonos… Ejemplo, Évole apenas hizo hincapié acerca de las verdades más evidentes, como que Pedro Sánchez rebajó de 110 diputados, el fracaso por el que Rubalcaba se marchó. A 90 primero, a 85 después. Por ejemplo, que un Sánchez, ya sin careta, asegurara que lo suyo era el Frente Popular, es decir, la alianza con Podemos. Decíamos ayer que la guerra civil comenzó cuando los socialistas de la II República se convirtieron en republicanos y cuando los Julián Besteiro cedieron ante los Indalecio Prieto o los Largo Caballero. En definitiva, Sánchez ya no oculta que lo suyo es el Frente Popular con Podemos y los independentistas. ¿Por qué iba a hacerlo? En cualquier caso, Sánchez se rebela como un bicho, pero un bicho muy necio, porque ir repartiendo hachazos y calumnias a diestro y siniestro no es la mejor manera de recuperar el liderazgo. Y Évole es el tiralevitas aprovechado… que colabora en el hundimiento del PSOE. Como Pedro Sánchez. Hispanidad redaccion@hispanidad.com