Lo explica Alfonso Ussia en su reportaje de La Razón, del viernes, 25 de octubre, titulado 'Almudenita'. “Almudena Grandes ha concedido el premio Nacional de Narrativa a la eximia obra “Lectura fácil” de la granadina Cristina Morales por su propuesta “radical y radicalmente original” -toma ya, argumentos rompedores-.

Morales vive en Cuba, becada por la AECID, entidad dependiente del Ministerio de Asuntos Exteriores y de Cooperación. O sea, de todos los españoles. De usted y de mí, también.

El caso es que la “radicalmente original” Cristina Morales, residente habitual en Barcelona, -describe Ussía- “ha descrito con gozo los acontecimientos salvajes de los CDR de los últimos días”. Ha dicho, la ilustre premiada “es una alegría ver el centro, las vías comerciales tomadas por la explotación turística y capitalista, de las que estamos desposeídas quienes vivimos allí. Es una alegría que haya fuego en vez de tiendas y cafeterías abiertas. La violencia es de la Policía, que es lo único que se puede esperar de la Policía. Es un cuerpo violento ante el que sólo cabe el sometimiento o la autodefensa”. Pues bien, esta escritora “radicalmente original” que habla de capitalismo, de violencia de la policía y otras cuestiones varias, “ya ha declarado que no tiene intención, a pesar de su pertenencia a lo “radicalmente original” de renunciar a los 20.000 euros del premio de Narrativa” porque como señala Ussía “el sistema y el antisistema se dan la mano cuando un talón de dinero público- dinero que sale de su bolsillo, y del mío también- anda de por medio.

Finaliza Alfonso Ussía advirtiendo que “seguiremos teniendo sorpresas, porque Almundena Grandes se mantendrá anclada en la placidez recompensada de los jurados… Entre reunión y reunión, nos seguirá deleitando con su literatura de chichis y pitilines, que es la que domina con creces y holgura”.

Por cierto, la portavoz del Gobierno, Isabel Celáa ha respondido a preguntas de los periodistas sobre las declaraciones de Cristina Morales en torno a Cataluña: "Condena absoluta y sin paliativos" a toda declaración como esta, que -ha añadido Celáa- habrá sentado mal a toda la ciudadanía. Tan rotunda y absoluta es la condena del Gobierno, como rotundos son los 20.000 que ya se tiene en su bolsillo la "radicalmente original" Cristina Morales.