No sé si López Obrador simplemente se ‘coloca’ o es fruto de su grandísima humildad, pero ahora el presidente mexicano se compara… Con Jesucristo. Porque, el propósito de su gobierno, dijo, “es que tengan mejores condiciones de vida y de trabajo los más necesitados, esto es humano, es justicia social y es también cristianismo”.

Me van (a) criticar, pero lo voy a decir. Miren, ¿por qué sacrificaron a Jesucristo? ¿Por qué lo espiaban y lo seguían? Por defender a los humildes, por defender a los pobres, esa es la historia real”.

“Entonces, que nadie se alarme cuando se mencione la palabra cristianismo. Cristianismo es humanismo”, añadió.

Según López Obrador, “todas las religiones tienen ese propósito: el humanismo, el amor al prójimo, esa es la justicia social”. “A eso se le puede llamar solidaridad, se le puede llamar fraternidad, se le puede llamar de distintas maneras, pero es ser realmente fraterno con los demás, que haya humanismo, que no se le dé la espalda al que sufre”. AMLO… comparte tu secreto… ¿qué te fumas?