La seguridad no es lo único que importa. No puede serlo. Si paralizas toda la vida social, como está ocurriendo en Bélgica para evitar atentados aumentarás el terror de la población que es el objetivo primero de los terroristas. Por una parte, la prevención aumenta el miedo. Por otra, no es posible blindar permanentemente una ciudad, que representa una forma más, no la definitiva, de detener a los fanáticos musulmanes. Las medias de seguridad son la parte pasiva de la lucha contra el terror. La parte activa es perseguir a los comandos, la labor de investigación. Labor que corresponde a la policía pero en la que también pueden colaborar los ciudadanos cuando ven algo sospechoso. A los periodistas de París se les localizó gracias a un soplo ciudadano. Por otra parte, lo mejor es vivir como si nada hubiera pasado pero no dejar de investigar y neutralizar a los terroristas. Porque si paralizas la vida social entonces el terrorismo ya ha ganado sin necesidad de asesinar. Hispanidad redaccion@hispanidad.com