El próximo domingo, 20 de marzo de 2016, Hispanidad, el decano de la prensa digital española, que es tanto como decir de la prensa independiente, cumple 20 años. Lo hace en un momento de profundo desaliento en la profesión. Hablar con los más veteranos, los procedentes de la prensa vegetal es como instalarse en una unidad de cuidados paliativos, justo al lado del agonizante: los que sufren, sufren, y los que no sufren, intentan aparentar que sufren, por aquello de no dar mal ejemplo. Pues resulta que esta es una imagen falsa o interesada, a veces, ambas cosas a la vez. El periodismo atraviesa, gracias a Internet, su mejor momento. Ya no hay cuatro periódicos, sino cuatrocientos. Es verdad que la prensa papel se muere pero también lo es que la prensa digital no sólo se ha consolidado sino que ha multiplicado el pluralismo. Veamos cómo eran las cosas en 1996: un oligopolio de la prensa, hoy ya reducido a cuatro periódicos nacionales, una grupo de cadenas de radio (reducidas hoy a tres) de carácter concesional, al igual que la televisión, reducida hoy a un duopolio publicitario y, lo que es peor, informativo: Mediaset y Atresmedia. El resto son meras comparsas o circuitos de alcance regional o local. Hoy Internet ha multiplicado el número de voces. Por ejemplo, la cosmovisión cristiana de la existencia, vulgo cristianismo, que había sido desterrado de los medios informativos, ha recuperado su posición. Las páginas cristianas y la perspectiva cristiana de la actualidad, condenada antes al desguace, ha revivido, por suerte para todos: cristianos e incrédulos. Eran los tiempos en los que yo trabajaba en cierto semanario y me vi obligado a escribir un libro (en aquel entonces existían unas cosas llamadas libros) titulado ¿Por qué soy cristiano y, sin embargo, periodista? Si no lo hubiese escrito me hubiera ahogado, pues la presión de lo políticamente correcto resultaba tan asfixiante… que te permitía decir o escribir lo que quisieras mientras se considerara políticamente correcto. Es decir podías comportarte como quisieras salvo como lo que yo era: católico. Pues bien en Hispanidad nunca me han censurado por cristiano. Gracias a ser un medio pequeño, me ocurre lo mismo que a Guareschi, el creador de Camilo, cuando decía: "Trabajo en un semanario que valora mucho mis artículos, quizás por el hecho de ser yo el director del mismo". Lo que ha ocurrido con Internet es que el pluralismo ha regresado al periodismo, aunque muchos de los voceros de tan noble concepto se encuentran más cómodos en el oligopolio. Por el momento, el pluralismo digital sólo alcanza a la prensa escrita, pero en breve llegará a la radio y, sobre todo, a la TV. Todavía hoy, la TV de un emisor frente a receptores masivos continúa siendo el medio más poderoso, que no el más influyente, pero la TV a la carta ya empieza a surgir y los vídeos de Youtube acabarán por cargarse al Duopolio Mediaset-Atresmedia. ¿Les parece exagerado? Pues lo mismo decían los mejores periodistas de prensa en 1996 y ya ven donde han acabado: la prensa vegetal agoniza. No digo esto con agrado: soy un admirador del diario papel. Además, ¿ha bajado la calidad de la prensa en soporte papel? No, ha subido, pero la prensa electrónica resulta más cómoda. El hombre puede vencer al espíritu comodón del mínimo esfuerzo y lo fácil, pero la humanidad jamás ha renunciado a emplear una nueva tecnología. Resumiendo: el periodismo no está en su peor momento, está en el mejor. Lo que ocurre es que se trata de otro tipo de periodismo. Por de pronto, manda lo pequeño y eso implica muchas cosas. Continuará. Eulogio López eulogio@hispanidad.com