Demasiadas incógnitas sobre el banco malo público que, en cualquier caso, acabará por ser una subvención pública a la banca.

Pero las incógnitas son aún demasiadas. Por ejemplo, ¿qué ocurre con los inmuebles embargados por la banca, donde ya no hay relación crediticia sino ladrillos y llaves? Los bancos se los traspasarán al SAREB (Mohamed Sareb, como se le empieza conocer). Y ahora, ¿quién vende esos pisos, trasteros, fincas, etc.? ¿El FROB? No veo a los funcionarios del Banco de España (en la imagen) acudir a enseñar una vivienda embargada al posible comprador en Hinojosa del Duque. Ni le veo cerrando la transacción.

Tampoco se les puede otorgar la función a una inmobiliaria, a las que no se les ha concedido traspasar sus fallidos al SAREB.

No, la idea del FROB es que sean los propios bancos, a través de su red de sucursales, los que vendan los inmuebles, con la correspondiente comisión, naturalmente. Los bancos son malos vendedores de pisos pero, además, también tienen que vender los suyos.

¿Una cuestión menor? De eso nada. El final del túnel de la burbuja inmobiliaria sólo será una realidad cuando los inmuebles caídos por esa burbuja vuelvan a colocarse, es decir, a venderse. De otra forma habremos hecho un pan con unas tortas.

Eulogio López

eulogio@hispanidad.com.