Mientras tanto, Cáritas alerta de las dificultades que tiene para atender a los más necesitados en GazaEl terror vuelve a Israel. A las 11.40 horas de este miércoles, una fuerte explosión en un autobús público en la calle Shaul Melech, en el centro de Tel Aviv, ha causado una veintena de heridos, tres de ellos muy graves.

El Gobierno israelí ha confirmado que se trata de una atentado terrorista, pero no suicida. No se producía uno de este tipo contra civiles en Israel desde hacía cinco años, lo que devuelto a los habitantes de esta ciudad a los tiempos de la Segunda Intifada.

La Policía israelí ha detenido a una persona supuestamente implicada en el atentado y según la edición digital del 'Jerusalem Post', la Policía ha detenido a una persona y cree que una segunda, una mujer, se ha dado a la fuga cargada con explosivos.

Un portavoz del Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás) ha declarado este miércoles que el atentado contra un autobús en el centro de Tel Aviv es la "respuesta natural a las matanzas israelíes". "Hamás bendice el ataque de Tel Aviv, que considera la respuesta natural a las matanzas israelíes en Gaza". Y es que, tras la muerte del jefe del 'brazo armado' de Hamas, Ahmed Jabari, el pasado miércoles en un ataque israelí en Gaza, las facciones palestinas habíaan amenazado con "golpear en el corazón del enemigo".

El suceso se produce en medio de la violencia desatada entre israelíes y palestinos por la operación militar 'Pilar de Defensa' que el Ejército de Israel lanzó contra la franja de Gaza hace ocho días en respuesta a proyectiles lanzados desde Gaza. Desde que se inició la ofensiva israelí han muerto unos 140 palestinos y más de un millar han resultado heridos, mientras que han perdido la vida 5 israelíes y sufrido heridas alrededor de 40.

El nuevo incidente coincide además con un momento en que israelíes y palestinos tratan de alcanzar un alto el fuego con contactos a través de mediadores internacionales. La secretaria de Estado de EEUU, Hillary Clinton, se encuentra este miércoles en El Cairo para reunirse con el presidente egipcio, Mohamed Morsi, para tratar de lograr un alto el fuego entre las partes.

Y mientras todo esto ocurre, los misioneros y la Iglesia se preocupan por los más necesitados en la zona. Cáritas Jerusalén, en un breve informe, ha alertado de las serias dificultades a las que se enfrenta actualmente para operar en Gaza a causa de la escalada de violencia en la zona. Cáritas Jerusalén desarrolla en Gaza un proyecto de asistencia médica, que incluye una clínica móvil y un centro de salud, así como diversos programas de apoyo a enfermos crónicas y de acompañamiento psicosocial para niños con prótesis (como consecuencia del conflicto de 2008-9) y sus madres.

Aunque la clínica móvil puso mantener su actividad durante los primeros días del conflicto, ha tenido que cesar su actividad a causa del deterioro de la seguridad en la región. En esa misma situación se encuentra el centro de salud, que se ha visto obligado a reducir sus servicios debido a los bombardeos y al grave riesgo que ello lleva emparejado para los miembros del equipo médico. De hecho, la casa de uno de sus integrantes fue bombardeada hace unos días justo después de salir de ella.

En medio de esta crisis y a pesar de las dificultades descritas, la Cáritas local está intentando adquirir por todos los medios el mayor volumen posible de material médico para apoyar la actividad de los equipos médicos que actúan en Gaza para atender a las víctimas. Y a pesar del cierre de sus centros de salud, Cáritas Jerusalén continúa en medio de esta crisis al lado de los habitantes de Gaza, donde están presentes dos de sus coordinadores que, junto a otro coordinador de proyecto en Jerusalén, están evaluando día a día las necesidades de la población y se mantienen en contacto permanente con los hospitales de la Franja.

En su informe de situación, Cáritas Jerusalén indica que una de las mayores demandas actuales, además de los suministros médicos, son agua potable, pañales y leche maternizada, así como protectores de plástico para proteger las ventanas durante las explosiones.

Cáritas Jerusalén confía en poder reanudar totalmente la actividad de sus programas tan pronto como sea posible. Una vez que la situación se normalice, está previsto poner en marcha una operación de distribución de agua y alimentos a los damnificados, junto a un programa de reparto de botiquines de emergencia a 180 agentes comunitarios de Cáritas que han participado en un programa de formación en primeros auxilios para casos de emergencia gracias a un convenio con Cáritas Española y la AECID (Agencia Española de Cooperación Internacional). Pero para ello es indispensable el cese de las hostilidades en la Franja y la reapertura de la frontera.

Hasta entonces, "lo que podemos hacer ahora es rezar y condenar al mismo tiempo la violencia, porque no será ésta la que traiga una solución al conflicto palestino-israelí", ha señalado el obispo auxiliar de Jerusalén, monseñor William Shomali.

Asimismo, Zenit recoge un nuevo mensaje angustiado de la única parroquia de rito latino que hay en la Franja de Gaza. El padre Jorge Hernández, del Instituto del Verbo Encarnado (IVE), escribe un impresionante testimonio: "Y, ¿ustedes misioneros? Nosotros gracias a Dios estamos bien. Nuestra misión es estar junto a los cristianos de Gaza. Acompañarlos, llevar junto con ellos esta cruz. Así es que los llamamos por teléfono, los animamos y consolamos, al tiempo que les enseñamos el verdadero sentido del dolor cristiano, es decir, esa participación en los dolores de Cristo. Y este gesto nuestro, lo reconocen, lo valoran y lo agradecen. Incluso, lo piden: 'no se vayan'… 'entendemos que se tengan que ir, pero mejor sería que se queden con nosotros'… estas y otras muchas son las frases que nos dicen nuestros parroquianos. Y esto porque, el solo hecho de saberse acompañado en el dolor es ya un enorme alivio. Pues bien, esa es nuestra tarea".

José Ángel Gutiérrez
joseangel@hispanidad.com