Sr. Director:

Según el Comité de Bioética, que en 2007 creó el Gobierno socialista, existe un derecho a abortar como reconoce de hecho la legislación española, y existe el deber de facilitar el ejercicio del citado derecho en el marco del sistema sanitario público.

 

Lo que significa que el personal sanitario no puede esgrimir razones de conciencia para negarse a cumplir con sus deberes profesionales. Pienso, Sr. Director, que la argumentación es aberrante no sólo porque anula los derechos de libertad de conciencia, sino porque es la culminación de un proceso que niega el derecho a la vida de los no nacidos. Negarse a practicar un aborto por razones de conciencia es un ejercicio de razón y de libertad.

Todo hace pensar que este Comité, lejos de ofrecer garantías y contrapesos frente a la arbitrariedad y la prepotencia, ha sido diseñado para dar cobertura al proyecto ideológico de Zapatero. Ahora pretende justificar que "un no derecho" puede conculcar dos derechos humanos naturales: el derecho a la vida y el derecho a la objeción de conciencia. Además empiezan a prohibir y ridiculizar a quien se atreva de ponerlo, "el derecho al aborto", en tela de juicio.

Jesús Domingo Martínez