Sr. Director:
Mientras que en otros países europeos el Estado financia a sus iglesias, la última ofensiva laicista del PSOE ha puesto su objetivo en señalar a la Iglesia como ente privilegiado que, en plena crisis, no paga impuestos, no es necesario decir que entre los que no pagan está el propio partido y sus sindicatos y ONGs afines.

Pues bien, para darle el mayor eco posible reclamará en todos los ayuntamientos que la Iglesia pague el IBI. Olvidan que en España son los católicos quienes, con su marca en la declaración de la Renta, sostienen en su mayor parte a una Iglesia cuya acción social y solidaria, en España y en el mundo, no habría Gobierno alguno capaz de realizar.

¿Es que ahora pretende ganarse a una minoría laicista? Difícil lo tendrá para volver a gobernar una partido con tanta falta de sentido de Estado, pues sabe muy bien cual es la función social que la Iglesia está llevando a cabo y que hay leyes y concordatos de por medio.

Enric Barrull Casals