Rusia y China vuelven a votar conjuntamente frente a Europa, EEUU e Israel en la ONU

 

Lejanos parecía que habían quedado esos años 60 y 70 del pasado siglo XX cuando la guerra fría -el enfrentamiento y enemistad entre el bloque comunista liderado por la URSS y las democracias occidentales abanderadas por EEUU- ocupaba la actualidad de todo el escenario internacional. La actualidad y -podríamos añadir- el miedo, pues el pánico a una confrontación nuclear dominaba la geopolítica mundial.

Pues bien: en las últimas horas parece que resurge esa guerra fría. El causante es Siria, un país que -bajo la tiranía del presidente Bashar al-Assad- está ejerciendo la violencia y la represión contra sus ciudadanos. Cuatro países de la UE presentaron una resolución ante el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas para condenar a Siria por tales acciones. Pero China y Rusia, en calidad de miembros permanentes del Consejo, la vetaron.

Y no parece buena idea, pues el presidente sirio, Bashar al Assad, parece que ha entrado por la senda de la locura y algún 'toque' habría que darle. Hoy se ha sabido -por la agencia de noticias iraní FARS- que advirtió al ministro de Exteriores turco, Ahmad Davutoglu, de que lanzaría misiles contra Israel, en el caso de que la OTAN realizara una intervención militar similar a la de Libia en su país. En ese ataque, Siria contaría con la ayuda de Irán, o sea, el régimen totalitarista islámico, y se dirigiría también contra la flota estadounidense y contra los intereses europeos en el Golfo Pérsico. Por cierto, una Turquía cada vez más envalentonada, bajo la también tiranía de Erdogan, quien hoy avisaba de que "en estos momentos, Israel es un peligro para la región porque dispone de la bomba atómica".

Así pues, vuelve la guerra fría: miedo a un escenario nuclear; y Estados Unidos y sus aliados europeos frente a Rusia y China, esta última todavía comunista. Esperemos que no pase de ahí, como en la segunda mitad del siglo pasado...

José Ángel Gutiérrez
joseangel@hispanidad.com