Lo dice la cantante irlandesa Sinéad O'Connor a quien alguien ha tenido el mal gusto de invitar a cantar en España. Ahora bien, si no tienes razón tienes que rectificar, y eso se llama arrepentimiento, sólo que la gran O'Connor, como todos los patanes desde que el mundo es mundo, "no se arrepiente de nada". Y claro, como no se arrepiente, no cambia, y como no cambia, no mejora. Un dramón.

Sinéad no se hizo famosa por sus composiciones musicales sino por romper una foto del Papa en la televisión americana. Cada cual se promociona como puede. El problema no es ese, el problemas es que la genial artista lo explica así: "Sufro trastorno bipolar desde hace siete años pero la gente me ha tratado como una enferma desde que rompí la foto del Papa en la televisión americana. Y eso fue muy doloroso y decepcionante porque tuve que lidiar con muchos prejuicios. Fue injusto".

Que no, princesa de las mareas: no tuviste que lidiar con muchos prejuicios, sino con muchos juicios, que es distinto, y que no tienen por qué ser juicios injustos.

Además, tu drama no consiste en romper la foto del Papa ni en las reacciones que tamaña chorrada supone: tu drama es que no te arrepientes de nada. ¿Comprendes

Porque la clave de la existencia está en eso: en rectificar, en el arrepentimiento y el perdón, dos fenómenos que forman una sola realidad bipolar. Pero es la única realidad posible.

Eulogio López

Eulogio@hispanidad.com