Sr. Director:
Los ciudadanos estamos ya hartos de tantos recortes; pero, por favor, ¿cómo podemos ser tan insensatos los ciudadanos? ¿De qué nos quejamos hoy tanto?

Los recortes de hoy no son nuevos…ya hace muchos años que estamos sufriendo grandes recortes…ya hace muchos años que se lleva recortando en la familia y en la Educación…y ahora nos quejamos y nos lamentamos. Cuando no hemos querido complicarnos la vida en la educación de los hijos. Sí, en la familia se ha recortado mucho, por un gran y grave complejo de  conservadores y hemos querido ejercer como padres modernos y dejar a los hijos la libertad que nosotros no hemos tenido. ¿Qué  nosotros no hemos tenido libertad?

¿En qué hemos recortado? En valores y en virtudes. Los recortes de la familia han sido en: autoridad y obediencia, en actos de servicio y colaboración en casa; se ha recortado en generosidad y  gratuidad, se ha recortado en abstinencia, sobriedad; se ha recortado en vida común, en orden -cada uno come y llega cuando quiere-, en sacrificio en beneficio de los otros; se ha recortado en el ahorro, en preguntar si es conveniente o  no actuar de una determinada manera; se ha recortado en saber dominarse ante las dificultades; se ha recortado en deberes, gastando mucho en derechos; se ha recortado, de forma radical, en la dimensión espiritual y cristiana, porque no sea que nos fueran a tachar de…se ha recortado en el número de nacimientos, con el aborto.

Y ¿los recortes en la enseñanza? En la enseñanza se cambio la forma de llamar al enseñante: "profesor"; porque a este tipo solo se interesó por formar la cabeza de  sus alumnos, pero no el corazón y los sentimientos rectos para la formación integral de la persona; porque a eso le llamaban adoctrinar. En la enseñanza se recortó en humanidad y en" humanidades".

Y, en algún caso, se ahorró en el respeto a la libertad de los padres y enseñaban cosas con criterios distintos a los padres. Menos mal que ahora se llaman "maestros"; porque eso es lo que hacían antes los maestros, colaborar con los padres en una verdadera educación integral. Educando para el trabajo y para la vida.

Así que los recortes económicos de ahora, tienen sus antecedentes en otros recortes no económicos. Y ahora nos va  a costar mucho salir de esta crisis que lo fue y lo es de valores.

Nos hemos preocupado de "tener" a costa de lo que sea  y no tanto de "ser"  persona que vive en y para la sociedad.

Francisco Blanco Galán