• La audiencia acepta la regularización realizada por la familia: 200 millones de euros. 
  • Los dos hermanos Emilio (en la imagen) y Jaime Botín, así como sus hijos, se enfrentaban a penas de hasta 4 años de cárcel.
  • Con esta resolución, ante la que cabe recurso, se pone fin a los periplos judiciales del clan de banqueros que controlan el Santander y Bankinter.

El Juzgado de Instrucción número 4 de la Audiencia Nacional ha decidido archivar la querella contra la familia Botín por el asunto de las cuentas en Suiza, según acaba de comunicar el alto tribunal. En el auto publicado se informa del "sobreseimiento libre y el archivo de las presentes actuaciones". El caso se ha sobreseído aplicando el artículo 305.4 del Código Penal, que permite las regularizaciones fiscales antes de la comunicación al contribuyente de la apertura de un expediente por parte del fisco.

No obstante "el auto no es firme" y "podrá interponer recurso en el plazo de tres meses. La familia Botín se enfrentaba a penas de hasta cuatro años de cárcel.

El proceso arranca de junio de 2011, cuando el juez de la Audiencia Nacional, Fernando Andreu, admitió a trámite una denuncia por delitos contra la Hacienda Pública y falsedad documental que fue presentada por la fiscalía anticorrupción contra Emilio Botín y sus cinco hijos. La denuncia también afectaba a Jaime Botín, hermano del banquero y a los cinco hijos que también tiene éste.

El 24 de mayo de 2010 las autoridades fiscales francesas informaron a la Agencia Estatal de la Administración Tributaria (AEAT) sobre la existencia de diversos clientes españoles de la entidad bancaria HSBC en Suiza, con fondos depositados en cuentas del banco suizo que no habían presentado las autoliquidaciones del IRPF y/o del impuesto sobre el patrimonio de los ejercicios de 2005 a 2009.

La denuncia fue admitida a trámite y se nombraron dos peritos encargados de verificar la regularización del IRPF en el periodo comprendido entre los años 2005 a 2008 así como el Impuesto sobre Patrimonio.

Este año, en el 9 de marzo y el 11 de mayo los peritos presentaron sus informes. Once días después de que fuera recibido el último el caso ha sido sobreseído y archivadas las actuaciones. La razón argumentada ha sido la regularización practicada por los denunciados, que según el juez de la Audiencia Nacional ha sido correcta, según el auto dictado este martes 22 de mayo. De esta forma lo ha expuesto: "la regularización practicada por los denunciados se puede considerar que es correcta y anterior a que la Agencia Tributaria incoara un procedimiento de inspección y verificación".

El auto menciona los cerca de 90 millones de euros abonados por Jaime Botín, empresario y principal accionista de Bankinter con el 24% del capital, y sus cinco hijos. Sin embargo, no se aportan las cantidades que han sido sufragadas por Emilio Botín y sus hijos de forma detallada.

Se ha publicado que los doce miembros de la familia Botín presentaron 72 declaraciones del IRPF y del Impuesto sobre Patrimonio de entre 2005 y 2009 por los activos de la herencia familiar en Suiza por un importe de 200 millones de euros, incluidos los recargos.

El juez Andreu ha explicado en su resolución que el sobreseimiento se produce por la regularización de la situación fiscal de forma voluntaria. De esta forma los imputados quedan exentos de la responsabilidad criminal, una decisión ajena "al contenido injusto y, probablemente también, de culpabilidad del hecho". La regularización, según el juez, "afecta exclusivamente al elemento de la punibilidad, excluyéndola por razones eminentemente político-criminales: la reparación del perjuicio irrogado mediante el pago de las deudas exigibles eludidas". Los miembros de la familia Botín se enfrentaban a penas de hasta cuatros años de cárcel.

Andrés Velázquez

andres@hispanidad.com