• El responsable inmobiliario del fondo norteamericano es su antiguo jefe en el Círculo de Empresarios.
  • Blackstone negocia la compra de paquetes inmobiliarias de la SAREB.
  • Llueve sobre mojado, porque la acusación contra la presidenta del banco malo es de vender activos a bajo precio a fondos especulativos.
  • Y los bancos accionistas de la SAREB siguen quejándose de las condiciones que les impone Romana para la venta de los activos trasferidos.

Decíamos ayer que las aguas bajan revueltas en el banco malo SAREB. Su presidenta, Belén Romana, se ha topado con la oposición de buena parte de sus ejecutivos y del Consejo, donde figuran los bancos. Le acusan de vender los mejores activos a bajo precio, en bloque, a fondos especualtivos.

Pues bien, ahora, la 'oposición' tiene más motivos para quejarse. Cuando Romana abandona la Administración Pública, el presidente del Círculo de Empresarios, Claudio Boada (en la imagen), le ficha como secretaria general de la organización empresarial.

Ahora Boada es el responsable de capital riesgo y de inmobiliarias de Blackstone, y resulta que Blackstone negocia con la SAREB la venta de un importante paquete de activos inmobiliarios.   

Llueve sobre mojado porque si los ejecutivos de la SAREB se han revelado contra Romana, también los bancos accionistas, presentes en el Consejo, están descontentos -y no lo ocultan- con unas ventas al por mayor a bajo precio mientras a ellos se les ponen condiciones que consideran duras para poder revender los activos trasferidos.

Eulogio López

eulogio@hispanidad.com