Lo siento, pero nuevamente acudo a Juan Carlos Sanahuja quien lo cuenta, una vez más, mucho mejor que yo en Noticias Globales. Los cristianos, siempre tan lelos, hemos concluido que la Conferencia de Naciones Unidas Río-20, y entonces es cuando Noticias Globales se ha visto obligada a recordar que, como no podía ser de otra forma, que la conferencia ultrafeminista no ha servido sino para pregonar el aborto y para lanzar otra misil homicida contra la raza humana, culpable del subdesarrollo planetario, miren por dónde.

"¿De qué victoria hablan?", se pregunta Noticias Globales. Se refiere a los medios cristianos, emocionados ante una ideología que trata de solucionar el hambre en el mundo reduciendo, no la hambruna, sino el número de hambrientos, a ser posible en el seno de sus madres, antes de que nazcan, que, de otra forma, se rebelarían. Todo ello sin reparar en que la expresión 'desarrollo sostenible', tan aplaudida desde instancias cristianas, no es otra cosa que aborto y anticoncepción y que el lobby feminista de Naciones Unidas trata de borrar las dos condiciones femeninas más egregias de la mujer: la de virgen y la de madre.

En cualquier caso, Noticias Globales ofrece un buen ejemplo para demostrar su tesis: la anfitriona del invento ha sido la ministra brasileña para Asuntos de la Mujer, "Eleonora Menicucci: ex-guerrillera, divorciada, que declaró ser bisexual y haber hecho dos abortos en su vida". Sin comentarios.

Sería bueno que los católicos fuéramos astutos como serpientes y prudentes como palomas, no al revés.