La Unión Europea no transfiere dinero, sino que quiere comprar la deuda más barata

 

Grecia coloca letras a seis meses al 4,88%, un 1,6% más que en la anterior subasta del 12 de abril.

La crisis griega sigue afectando a los mercados europeos y la subasta de este martes lo único que ha hecho ha sido estabilizarlos, aunque se está a la espera de la entrevista que la canciller alemana Merkel tendrá con los presidente de la Comisión Europea y del Consejo de Europa.

Si con el rescate ya se hicieron las cosas mal -recordemos que desde Hispanidad se apuesta por que los países en quiebra, quiebren-, la solución que se pretende emplear para el segundo rescate es una rectificación peor que la primera: es apretar más el nudo en el cuello del ahorcado.

Grecia ha subastado este martes letras y ha colocado 1.625 millones de euros al 4,88%, un 1,66% más que en la subasta del pasado 12 de abril. Aunque los intereses son más elevados, lo han sido menos de lo previsto, y desde Bruselas se pretende que los países de la Unión Europea ayuden a Grecia con la compra de esa deuda pero a un interés inferior de lo que se está pagando. En lugar de prestar directamente, como se había hecho hasta ahora con los fondos de competitividad, lo que se le pide a Grecia es que se endeude más, eso sí, a intereses más bajos, para salir del problema. Es decir, echar gasolina al fuego. Mientras tanto para enviar la suspensión de pagos que dañaría a los bancos europeos -curiosamente, franceses y alemanes-, la zona euro quiere prestar 60.000 millones de euros adicionales.

Y mientras eso sucede, España sigue temblando ante los efectos que el rescate a Grecia puede provocar en nuestra economía. Mientras se está a la espera de lo que resulte de la reunión de urgencia que va a tener la canciller alemana Angela Merkel con el presidente de la Comisión Europea, José Durao Barroso, y el del Consejo Europeo, Herman Von Rampuy, la deuda española sigue bailando al son de los mercados y este lunes se ha situado en los 230 puntos básicos. Otro de los países periféricos, Portugal, ha visto cómo se ha vuelto a disparar su deuda alcanzando registros históricos al llegar al 11,93% en la tasa de interés a cinco años.

Juan María Piñero

juanmaria@hispanidad.com