• El presidente del Gobierno matiza que "la crisis es historia" por "la recuperacióncon concluirá hasta que se sienta en los bolsillos de todos los españoles".
  • Firma el pacto con los agentes sociales para prorrogar la ayuda de 426 euros mensuales a parados de larga duración, con cargas familiares y que han agotado las prestaciones y subsidios.
  • Los beneficiarios de la nueva ayuda adquieren un 'compromiso de actividad'.
Al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy (en la imagen) le ha dado hoy lunes un ataque de realismo y ha matizado sus palabras de la pasada semana en las que afirmó que "en muchos aspectos la crisis es historia del pasado". El presidente del Gobierno ha dicho: "La recuperación no será completa hasta que no llegue a cada español que no tiene trabajo y no se sienta en los bolsillos de todos los españoles". Y ha reconocido que "la recuperación no ha llegado a todos ni a todos por igual".

Ya saben, aquello que hemos repetido hasta la saciedad de que la macroeconomía va bien -o mejor- pero no las economías de las familias... Esto lo ha captado hoy el líder popular y de esta manera, Rajoy da marcha atrás en el triunfalismo del que hizo gala la semana pasada. 

Y lo ha hecho tras presidir la firma del acuerdo entre el Gobierno y los agentes sociales, por el que se creará una nueva ayuda de 426 euros mensuales para parados de larga duración, con cargas familiares y que han agotado las prestaciones y subsidios por desempleo, en el marco del Programa Extraordinario de Activación para el Empleo. El plan estará vigente año y medio aunque podría prorrogarse.

"Todos teníamos en mente a todas estas personas en paro desde hace mucho tiempo. Con el acuerdo de hoy, 450.000 personas tendrán ayudas especiales. No es cuestión de insistir, pero es un programa que busca la integración efectiva, no ayudas que sólo sirvan para paliar situaciones personales extremas", ha añadido Rajoy.

En el acuerdo con los agentes sociales han firmado los presidentes de CEOE y Cepyme, Juan Rosell y Antonio Garamendi; y los secretarios generales de CC.OO y UGT, Ignacio Fernández Toxo y Cándido Méndez, quienes han pasado el testigo, finalmente, a la ministra de Empleo, Fátima Báñez.

Por cierto que a Fernández Toxo este acuerdo le encanta. Hoy lunes ha llegado a decir en una entrevista en RNE que "es un acuerdo que no tiene peros" y que "más que una ayuda, es un programa de reinserción".

Se refería, seguramente, a que quienes accedan a esta nueva ayuda deberán adquirir un compromiso de actividad, mientras que el Servicio Público de Empleo tendrá un mes de plazo para ofrecer a cada parado que acceda a la ayuda un itinerario laboral individualizado. Así, los parados que se sumen a este programa dispondrán de un tutor-orientador que les hará llegar las ofertas de empleo.

Si el parado que percibe la ayuda encuentra un empleo, seguirá cobrándola, pero esos 426 euros se descontarán del sueldo fijado para ese trabajo, por lo que el empresario solo pagará la diferencia de forma que el coste laboral estará cofinanciado entre empresa y el Servicio Público de Empleo.

También el presidente de CEOE, Juan Rosell, ha valorado el acuerdo y lo ha enmarcado en la situación de emergencia que vive España: "La emergencia social debe de tener una respuesta política adecuada".

Andrés Velázquez
andres@hispanidad.com