Sr. Director:
Acabo de leer su artículo y le escribo para decirle que está usted muy equivocado en algunas cuestiones. En Galicia las participaciones preferentes y la deuda subordinada se vendieron haciéndole creer a la gente que depositaba su dinero en un plazo fijo, llegando en algunos casos a dar libretas en las que se podía leer "Plazo Fijo".

Incluso hay casos de gente que firmó los contratos con el dedo. En la mayoría de los casos la documentación no existe o falta alguna parte.

Yo no me imagino a nadie invirtiendo todos los ahorros de una vida en un producto sin fecha de vencimiento si de verdad supiesen las condiciones. Si usted va al banco y le dicen que meta todos sus ahorros hasta el año 9999, que el pago de intereses está vinculado a los beneficios del banco y que su dinero no queda avalado por el fondo de garantía de depósitos, ¿metería allí los ahorros de toda su vida?

Seguro que no. En cambio si va al banco y le dicen que su dinero está seguro, que va a cobrar buenos intereses y que puede retirar el dinero cuando quiera avisando dos días antes, además de invertir en un producto con capital asegurado por el fondo de garantía de depósitos y usted se va a su casa con una libreta del banco que pone "plazo fijo" en este caso seguro que no tendría dudas. Pues esto es lo que pasó en Galicia. Un saludo de uno de los afectados.

Manuel Cores