Propietarias de un 14,5%, se están cargando de razones para tomar una decisión. Sin embargo, Demetrio Carceller todavía no puede contar con su apoyo para arrebatarle la Presidencia a Del Rivero. La batalla de Repsol puede acabar, a corto plazo, con Del Rivero, a medio plazo, con Antonio Brufau. No olvidemos que Rajoy busca una "renovación generacional" en las cúpulas empresariales. Vamos: colocar a lo suyos. Y ojo, porque Pemex no tira la toalla

¿Paz entre Sacyr y Repsol? Hombre, la paz siempre es hermosa, hasta en Euskadi o en Irak. ¿Quién puede negarse a negociar la paz? Ahora bien, entre la constructora Sacyr y la petrolera Repsol se ha llegado a un punto en que la paz resulta un tanto compleja, por no decir imposible. Ejemplos: ¿Aceptará Brufau un consejero delegado? No puede, eso sería tanto como decir que Pemex y Del Rivero tenían razón en la crítica a su gestión. Además, la inmensa mayoría del Consejo de Repsol apoyó la gestión de su presidente ejecutivo.

¿Se puede llegar a la paz rompiendo el acuerdo entre Sacyr y Pemex? Imposible: Del Rivero tendría que presentar la dimisión, no ya en Repsol, sino también en la constructora.

¿Es cierto que La Caixa ha tomado un mayor protagonismo en la batalla de Repsol? No más que el que siempre tuvo. Por el momento, Isidro Fainé apoya con claridad a Antonio Brufau. ¿Es cierto que las cuatro cajas de ahorros presentes en Sacyr, que poseen un 14,5% del capital, han adquirido un papel básico en Sacyr? Sí, lo es.

A ver si nos entendemos, las cuatro cajas accionistas de Sacyr (Novacaixagalicia, Bankia, Unicaja y Mare Nostrum) no han solicitado un acuerdo con Repsol, lo que hicieron el lunes es trasmitirle al presidente Del Rivero algo más grave: un ultimátum en toda regla: le han dado 15 días para que responda a una serie de cuestiones que tienen que ver con la actual situación de la constructora, con la refinanciación de la deuda y con el acuerdo con Pemex. No pretenden con ello que Demetrio Carceller sustituya mañana a Del Rivero al frente de Sacyr pero sí es verdad que se están armando de argumentos para cuando se produzca el vuelco.

La actitud de las cuatro entidades bancarizadas corre paralela a la estrategia del Partido Popular, empeñado en lo que en Génova califican como "renovación generacional" en las cúpulas empresariales, concepto que algún malpensado, por ejemplo yo, traduciría como colocar a los suyos en lugar de a los otros. Y esto afecta no sólo a Sacyr y a Repsol, sino a Telefónica e incluso al Santander (al BBVA no, que FG es amigo de la casa). Tampoco nos escandalicemos en exceso: es una ensoñación que sufre todo aquel partido político que roza La Moncloa. De hecho, Zapatero -para ser más exactos su vicepresidenta, Teresa Fernández de la Vega- tuvo mucho que ver en el recambio en la propia Repsol de Alfonso Cortina por Antonio Brufau, en el fracasado intento de echar a FG del BBVA -precisamente con Luis del Rivero-, en las exigencias a Telefónica para que colocara a amigos del PSOE o, lo más grave, en la defenestración de Manuel Pizarro en Endesa. En definitiva, errores mayúsculos de ZP que constituyen a día de hoy la tentación de Rajoy. Debería evitarla por el bien del tejido empresarial español.

Y dado que estamos hablando de propios y extraños, hay que preguntarse: ¿Qué tal caen Del Rivero y Brufau en el marianismo? Pues miren ustedes, a Del Rivero es el infierno y Brufau el purgatorio. A corto plazo, el PP sería feliz con un cambio en la Presidencia de Sacyr; a medio plazo no le incomodaría un cambio en la Presidencia de Repsol. Pero como las ambiciones no tienen por qué ser del todo irracionales, y puede albergar un reducto de sensatez (pongamos un 10%), esto nos lleva a una verdad incontrovertible: que Del Rivero ha quebrado Sacyr mientras Brufau ha fortalecido Repsol.

Paréntesis: un detalle que puede tener su importancia en esta batalla tan pacifista: El diario Canarias 7 nos sorprendía el día 12 con esta información: "Repsol sondea asumir DISA". Es decir, sondea asumir la red de gasolineras que Demetrio Carceller posee en Canarias.

Y a todo esto, ¿qué pasa con Pemex, que es la madre de todas las batallas? Pues en México su líder, Suárez Copell lo tiene difícil, por la oposición política a una operación que no deja de ser una huída hacia delante. Pemex es una sociedad muy apalancada con problemas de endeudamiento y, sobre todo, con una imagen de corrupción que le impide presentarse como víctima de los pérfidos colonizadores españoles. Tanto el PSOE, que no quiere otro fiasco Endesa, como el PP, coinciden en algo: Luis del Rivero eligió el peor compañero de viaje en su intento de arrebatarle el sillón presidencial a Brufau.

En resumen, para mí que una paz sin vencedores ni vencidos es ahora mismo un imposible. Brufau no va a caer antes de las elecciones, Del Rivero tiene más posibilidades de 'ser dimitido'. Eso sí, el murciano, como en él es habitual, no tira la toalla, pero los bancos acreedores le achuchan. Antes de diciembre tomarán una decisión sobre su crédito, de casi 5.000 millones de euros, donde ya tiene embargados sus dos activos rentables: las propias acciones de Repsol y la inmobiliaria Testa.

Eulogio López

eulogio@hispanidad.com