• Para que compren entidades españoles en crisis, nacionalizadas o no.
  • Por ahora no hay muchos candidatos, aunque BNP y Deutsche se muestran interesados en estudiar las ofertas que puedan surgir.
  • Además, el supervisor estaría dispuesto a analizar la entrada de bancos emergentes, incluidos los chinos.
  • Y la de fondos de capital riesgo, que tendrán que asegurar su deseo de "permanencia".
  • Además, el gobernador Linde aplicará la nueva normativa sobre refinanciaciones de forma 'flexible'. Así la banca española resultará más atractiva.

La situación del sistema financiero español ha llevado al Banco de España a abrir la puerta a la banca extranjera, algo que no sucedía desde la crisis de los años ochenta, cuando el Gobierno de turno impulsó la llegada de entidades como el Barclays, el Lloyd's o el City. La idea se repite: animar a la banca extranjera para que compren entidades en dificultades, nacionalizadas o no.

Hablamos de las nacionalizadas Bankia -la más difícil de 'colocar', pero que está bien encaminada- Catalunya Banc y NCG Banco, y de las que conforman el grupo II: BMN, Ceiss y Liberbank. En cuanto a BMN, y tal y como publicamos el viernes pasado, sorprende en el sector el trato de favor que está recibiendo por parte de las autoridades respecto al resto de entidades del grupo, ya que le están buscando una solución.

De momento, el apetito extranjero no es mucho. Sólo dos entidades han mostrado cierto interés en estudiar las ofertas que surjan: BNP y Deutsche Bank. Además, el supervisor estaría dispuesto a analizar la entrada de bancos emergentes, incluidos los chinos, sobre todo cuando se aclare el sistema de 'resolución' de bancos en Europa, preacordado por el Ecofin.

En su empeño aperturista, el Banco de España también está dispuesto a dejar entrar a fondos de capital riesgo, aunque para hacerlo tendrán que garantizar su deseo de permanencia. Y es que estamos hablando de banca doméstica, muy distinta a la banca de inversión.

En este contexto, ¿qué ocurre con la nueva normativa sobre refinanciaciones Al gobernador del Banco de España, Luis María Linde (en la imagen), no le queda más remedio que aplicarla de manera flexible e, incluso, acomodándose a las circunstancias de cada entidad. Es decir, será una aplicación a la carta.

En el sector no acaban de entender este último golpe del Banco de España, máxime cuando al mismo tiempo se les exige que abran el grifo del crédito.

Pablo Ferrer

pablo@hispanidad.com