Un mes después del acuerdo con los republicanos el presidente asegura que es posible reducir el déficit y crear empleo

 

El anuncio coincide con el nombramiento de Alan Krueger como principal asesor económico de la Casa Blanca.

Cada día que transcurre, la popularidad del presidente de los Estados Unidos, Barack Obama, va descendiendo paulatinamente. Por este motivo, el actual líder estadounidense pretende centrar el resto de la legislatura en la creación de empleo y en el crecimiento de la malograda economía del país, que son precisamente los aspectos en que es peor valorada la gestión del líder afroamericano.

En este sentido, y con claras vistas electorales, el presidente ha anunciado que presentará ante el Congreso un plan económico que desembocaría en la creación de un millón de empleos. No obstante, una vez más el actual inquilino del Despacho Oval incurre en un clara demagogia ya que no ha precisado en qué sectores se creará el empleo ni en qué consistirá dicho plan. Dicho proyecto del presidente coincide con el nombramiento de un nuevo jefe del equipo económico del presidente, que es profesor de la prestigiosa Universidad de Princeton, Alan Krueger y que es la nueva apuesta de Obama para gestionar la economía en lo que resta de legislatura.

En su discurso, el presidente también ha aseverado la importancia de mejorar el crecimiento del país y también ha señalado la importancia de lograr reducir el abultado déficit del país. En este aspecto, el presidente vuelve a dar bandazos ya que hace escasamente un mes llegó a un acuerdo con los republicanos por el que se acordó elevar el déficit del país, y el presidente afirmó que dicho acuerdo era insuficiente porque no permitía todo el incremento de deuda que el propio líder demócrata pretendía.

Este anuncio del presidente no ha creado demasiadas expectativas ni en los medios de comunicación del país, ni entre los analistas ni entre los ciudadanos de a pie, ya que la ciudadanía estadounidense empieza a estar acostumbrada a la falta de claridad del presidente en materia económico-laboral y comienza a propagarse la idea entre la ciudadanía de que la política económica de la Administración Obama se basa en meras improvisaciones que no conducen más que al aumento del desempleo y del déficit federal.

Gabriel López

gabriel@hispanidad.com