Los nuevos contratados cobrarán un 20% menos que la plantilla actualConfirmado. La marca japonesa Nissan ha adjudicado a su fábrica de Barcelona la producción de un nuevo turismo a partir de 2014, tras pactar con los sindicatos una mejora de la productividad. El nuevo modelo supondrá una inversión de 130 millones de euros y la creación de 1.000 empleos directos y 3.000 indirectos. El vehículo adjudicado será el primer turismo que se producirá en la factoría de Barcelona, especializada en 4x4 y furgonetas comerciales, y competirá en el mercado con modelos como el Seat León.

Pero esta adjudicación a la planta de Barcelona ha tenido su historia, después de más de seis meses de negociación entre la empresa y los sindicatos. Los sindicatos, en principio, se negaban a asumir la reducción de costes laborales, que era lo que quería la empresa, lo que provocó la división sindical en la planta, donde están representados USOC, CC.OO. y UGT.

La semana pasada USOC, la primera fuerza sindical, aceptó firmar en solitario el pacto de competitividad que reclamaba Nissan. A la vez, la empresa anunció que Barcelona había perdido su oportunidad de conseguir la adjudicación y augurara una "muerte lenta" de la planta. Entonces, CCOO y UGT (con mayoría juntos en el comité) elaboraron una propuesta alternativa que avalaron sus afiliados este pasado fin de semana en asamblea.

La propuesta consistió en la creación de una doble escala salarial, de manera que los nuevos contratados cobrarán un 20% menos que la plantilla actual. Lo que viene a significar la introducción en el acuerdo de una cláusula propuesta por CCOO y UGT, que blinda a los trabajadores actuales de posibles despidos para ser sustituidos por empleados más baratos.

Lo que lleva a plantearse la siguiente pregunta: ¿CCOO y UGT velan solo por los derechos de los trabajadores que ya trabajan

Andrés Velázquez
andres@hispanidad.com