Hace unos días leía que desde la secretaría general de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente se está promoviendo un conjunto de iniciativas legislativas en las que se trabaja de cara a lograr una actividad agraria y alimentaria más competitiva y con capacidad para generar mejores niveles de rentas.
Se pretende someter, antes de verano, a consulta el texto para la Ley de la Cadena Alimentaria por la que, entre otros puntos, se procederá a una regulación de las políticas de contratación con la gran distribución, así como la regulación de las prácticas abusivas y la capacidad de negociación de las organizaciones de productores. Considero que una ley sumamente necesaria para poder continuar la producción agroalimentaria.
Una segunda iniciativa es la elaboración de un Plan Estratégico para la Internacionalización de la industria alimentaria, con medidas de tipo empresarial, financieras y administrativas. Preparan igualmente un Programa de Innovación para toda la cadena alimentaria, así como una nueva política de sostenibilidad medioambiental.
Y es que el sector de la industria agroalimentaria, hoy motor en el comercio exterior, debería dar un paso más para, no solo vender fuera, sino también para producir aquí.
Domingo Martínez Madrid
