Sr. Director:
Si algo no se puede criticar a los dirigentes de CiU es que no realicen una activa política de protección de la familia.

De la suya propia, al menos. Ahí están los conocidos "hijísimos" de Jordi Pujol, los "hermanísimos" y "sobrinísimos" de varios consellers o el "cuñadisimo" de Artur Mas.

Todos están colocados -y bien colocados- en el entramado de la Generalitat. Ahora hemos sabido que la empresa del cuñado de Mas ha multiplicado por sesenta su facturación con la administración catalana desde que gobierna CiU, lo que dice mucho de Mas y su amor por la familia.

Eso sí, a costa de nuestros impuestos. Recuerdo que los dirigentes de CiU prometieron que su gobierno sólo trabajaría con los "mejores". Y qué suerte tienen algunos que en sus familias haya tantos "mejores".

Juan Sánchez Manrubia