• El Consejo de Administración de la petrolera decidirá el miércoles.
  • La oposición más buscada, Shell, impone unas condiciones inasumibles.
  • Será muy difícil que Brufau obtenga los 3.000 millones de euros previstos.
  • Tras el robo de YPF, la venta de la división de GNL.
  • Y a lo mejor hay que quedarse en una venta parcial, no total.

El presidente de Repsol, Antonio Brufau (en la imagen), ha convocado, para el miércoles 27, al Consejo de Administración. Un consejo importante, por cuanto si no surgen imprevistos de última hora, se adjudicará la división de GNL de la compañía, la operación más importante para cerrar un año que ha supuesto el robo-expropiación de la argentina YPF por parte del Gobierno de Cristina Fernández de Kirchner.

Los mejor colocados son los franceses de Total y los chinos de CNOC, pero todo indica que Repsol no obtendrá lo previsto: 3.000 millones de euros.

Además, se trata de un bloque de ventas muy heterogéneo, y los postores anhelan algunos activos pero no otros. Incluso es posible que haya que quedarse con una venta parcial, no total de toda la división.

Una espina clavada: entre los licitadores más adelantados no aparece Shell, probablemente la más adecuada para hacerse con el paquete.

Eulogio López

eulogio@hispanidad.com