Deberán utilizar la sanidad pública y saber lo que es un metrobús

El candidato a la Presidencia de la Comunidad de Madrid, Tomás Gómez, pedirá coherencia a sus consejeros regionales: "¿Iría usted a comer a un restaurante en el que el propietario se va al bar de enfrente?". Con esta imagen el líder del PSM justificaba la exigencia de que sus consejeros acudan a la sanidad pública y lleven a sus hijos a colegios dependientes de la Comunidad de Madrid. "¿Qué culpa tendré yo de que mi padre sea consejero?" pensarán los hijos de quienes desempeñen estos cargos.

¿Significa esto que los elegidos deberán renunciar a sus seguros médicos o sacar a sus hijos de los colegios concertados o privados? El aspirante socialista contesta indirectamente diciendo que "aceptar ser consejero es una decisión voluntaria" y su respuesta ha sido interpretada como que no va a obligarles a renunciar, pero sí parece que se trata de un compromiso previo.

Gómez aprovechó también para recordar que los suyos sabrán lo que es un metrobús, en referencia a la metedura de pata de José Ignacio Echeverría, consejero de transportes de Esperanza Aguirre, que aseguró que semejante título no existe. Echeverría puso entonces de manifiesto la distancia entre los políticos y la gente de la calle. Gómez tiene la oportunidad de demostrar que sus políticos son realmente gente común.

Mariano Tomás

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