Mahmud Jibril propuso al Consejo de Transición crear un Ejecutivo que gestione el país hasta su "liberación" definitiva de Gadafi

 

El pasado 16 de septiembre, el Consejo Nacional de Transición (CNT) libio fue reconocido por la Asamblea General de Naciones Unidas como el Gobierno legítimo de Libia. Está formado por un magma muy variado de personajes tales como líderes de tribus -en el país hay alrededor de 140 clanes tribales-, políticos disidentes de Gadafi, grupos opositores contra este e incluso militares. Este Consejo estableció un poder paralelo en las zonas fuera del dominio del dictador.

Y este fin de semana, el Consejo Nacional de Transición ha rechazado la propuesta del primer ministro interino de Libia, Mahmud Jibril, para concretar un Ejecutivo que gestione el país hasta su "liberación" definitiva de Gadafi. En lo único en que se ha puesto de acuerdo el CNT con Jibril ha sido en reducir el número de ministerios de 36 a 24. De hecho, los miembros del Consejo cuestionan hasta la propia continuidad de Jibril como uno de los líderes de la revuelta.

Da la casualidad de que Jibril es, de los miembros del CMT, uno de los menos fundamentalistas. Porque hay que recordar que este nuevo Consejo Nacional de Transición libio propugna la imposición de la Sharia, la ley islámica, en el orden civil, lo que en la práctica equivale a la implantación de otra dictadura. Recordamos las palabras de Abdul Jalil, presidente del Consejo Nacional de Transición (CNT): "Libia será un Estado democrático y plural, su religión será el islam y la sharia (la ley islámica) será la fuente de toda ley". Y aunque aseguró que los derechos de las minorías y la libertad religiosa estarán "garantizados", todos sabemos qué tipo de garantías son esas..., es decir, no habrá libertad religiosa.

Por lo pronto, el 29 de agosto, Jean Ping, presidente de la Unión Africana, denunció matanzas de negros por parte de miembros de CNT, con la excusa de ser mercenarios, lo cual no es muy buen preámbulo...

Y mientras, los países occidentales miran para otro lado, especialmente Francia, a quien la CNT prometió el 35% de los nuevos contratos petroleros. Porque eso de los derechos humanos queda muy bien sobre el papel, pero cuando de petróleo hablamos...

Precisamente, hoy, la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) también reconocía al Consejo Nacional de Transición (CNT) como representante legítimo de Libia ante este organismo.

A todo esto, el también dictador Gadafi sigue desaparecido desde que los rebeldes conquistasen la capital, Trípoli, a finales de agosto, aunque su portavoz reiteró que sigue en Libia.

José Ángel Gutiérrez
joseangel@hispanidad.com