Las operaciones apalancadas representan un 69% del volumen de la inversión

Optimismo moderado en el sector del capital riesgo, que ha visto recuperar sus niveles de inversión de 2007. En el primer semestre del año, las compañías de capital riesgo invirtieron 1.938 millones de euros, una cifra muy similar a los 1.934 millones de euros del primer semestre de 2007. Probablemente la dificultad para obtener créditos es lo que ha llevado a las empresas a recurrir a los fondos de capital riesgo.

No obstante, las operaciones LBO representan un 69% del volumen de la inversión. Las LBO son operaciones apalancadas, pero ¿cómo consiguen los fondos comprar una empresa, pagar en plazo la deuda con la que la compraron (capital más intereses) y obtener beneficio? Troceándola y vendiéndola por partes y/o reduciendo los gastos de la misma, generalmente mediante recortes de plantilla. Este tipo de operaciones se ha incrementado en un 298%.

En el lado opuesto, las operaciones dedicadas a apoyar nuevas iniciativas. En ellas está el origen del capital riesgo y suponían una ayuda para los emprendedores, que cuentan así con la ayuda de un inversor. Para los emprendedores no solo no hay créditos, sino que el capital riesgo ha reducido este tipo de operaciones en un 13%.

De cara al futuro, las empresas de capital riesgo, asociadas en torno a ASCRI, no oculta su preocupación en estos momentos por la captación de fondos. Ha alcanzado 1.490 millones de euros en el primer semestre, de los que más del 80% se ha debido a la aplicación de los fondos internacionales para operaciones concretas.

Aunque España no es un país prescindible para los grandes inversores, las dudas flotan en el ambiente. La principal cuestión para disiparlas es el éxito del proceso de bancarización de las cajas de ahorros. Los fondos españoles no entrarán, pero en la City están convencidos de que se trata del principal hito económico para España.

Rodrigo Martín

rodrigo@hispanidad.com