Si las familias actuaran como los Estados, esto es, como los políticos, estarían en la miseria. No se pueden endeudar como se endeuda un Estado. Y esto es lo que podríamos llamar el "sistema" del que tanto habla, no sólo los indignados, sino también, el Papa Francisco, éste mucho más sincero que aquellos.

Gran noticia: la Reserva Federal norteamericana retira los estímulos a la economía, vigentes durante seis años. En plata, que deja de comprar deuda pública, la manera más habitual de fabricar dinero para salir de la crisis. La verdad es que fabricar dinero nunca nos saca de la crisis sino que es la causa primera de la actual crisis... permanente.
Financieros y políticos aliados contra todos los demás: cómprame la deuda y no te dejo cobrar. Esto es el 'sistema'

Pero centrémonos en la compra, en la emisión de deuda. Es lo que llamamos la conjura Basilea, es decir la alianza entre financieros y políticos: los financieros compran la deuda con la que los políticos nos endeudan a todos los ciudadanos -y luego suben los impuestos- y a cambio los políticos no permiten que quiebre ningún banco... como bien sabemos en toda Europa. Si tienen dificultades les salvan con dinero público.

Pero el resultado de todo esto es que la deuda pública crece en todo Occidente. En Estados Unidos, la recuperación se hace a cargo de una deuda que ya copa el 108% del PIB (en España el 92%). Y casi toda Europa está igual o peor según recoge el Captor.

Recuerden que una de las claves, hoy olvidada por inalcanzable, de Pacto de Estabilidad Europeo, desde el mismísimo Maastricht aquí, era no superar el 60% de deuda del PIB. Pues bien, la Conjura Basilea, pieza clave del Nuevo Orden Mundial, ya nos ha puesto en cifras absolutamente vergonzantes.    

¿Quién pagará esa deuda Usted y yo, que estamos hipotecados para varias generaciones. O ponemos en marcha un jubileo de deuda pública -que esa sí es de todos, al revés que la propiedad pública- o esto estallará. Están advertidos.

Eulogio López

eulogio@hispanidad.com