Sr. Director:
En aquellas autonomías donde el PSOE ha asumido el discurso nacionalista lo ha acabado pagando en las urnas. Lo hemos visto en Cataluña y en Galicia.

Pero el PSOE no aprende. En Baleares otra vez la misma historia. Estamos a la cola en educación y empleo, pero a esa olla de grillos llamada pentapartito balear nada de eso parece importarle. Lo que sí le importa es aplicar las primeras multas lingüísticas -e inconstitucionales- en las islas. En vez de ayudar a las empresas a salir de la crisis, ahora se les sanciona y multa sólo por tener sus carteles en castellano en vez de catalán. El PSOE balear no ha aprendido la lección y va por el mismo camino del nacionalismo radical que llevó a la derrota electoral a los socialistas catalanes y gallegos. 
María González Gutiérrez