Benedicto XVI incide en "tres aspectos de la vida cristiana: la atención al otro, la reciprocidad y la santidad personal"

 

Este miércoles de ceniza, dio comienzo la Cuaresma que, según la RAE, es el "tiempo litúrgico de preparación de la Pascua de Resurrección, desde el miércoles de Ceniza hasta el Jueves Santo, y que se caracteriza por ser un período de penitencia".

Con esta ocasión, el Papa Benedicto XVI pronunció un discurso en la Audiencia General de este miércoles en el que, entre otras cosas, explicó que se trata de "un viaje de cuarenta días que nos llevará al Triduo Pascual, memoria de la pasión, muerte y resurrección del Señor, corazón del misterio de nuestra salvación.

En los primeros siglos de vida de la Iglesia, este era el momento en que los que habían oído y aceptado el mensaje de Cristo empezaban, paso a paso, su camino de fe y de conversión para llegar a recibir el sacramento del bautismo. Se trataba de un acercamiento al Dios vivo y de una iniciación a la fe que se realizaba gradualmente, mediante un cambio interior de parte de los catecúmenos, es decir, de aquellos que querían ser cristianos y ser incorporados a Cristo en la Iglesia". Pero lo mejor es leerlo entero aquí, recogido por Zenit.

Asimismo, el Papa ha elaborado un mensaje para la Cuaresma 2012 que comienza así: "La Cuaresma nos ofrece una vez más la oportunidad de reflexionar sobre el corazón de la vida cristiana: la caridad". Puede leerse íntegro aquí.

José Ángel Gutiérrez
joseangel@hispanidad.com