• El objetivo es deshacerse de 300 millones de euros, ante las malas perspectivas del Grupo que lidera Juan Luis Cebrián.
  • PRISA afronta una deuda por encima de los 3.100 millones… con sus principales buques tocados.
  • Y el presidente Rajoy le pierde el respeto, y el miedo, a El País, que a medida que aumenta las pérdidas se radicaliza más.
  • No hay manera de vender Sogecable, porque el Gobierno se niega.
  • Y la banca ha cerrado el grifo, una vez que tres entidades y una operadora con entrar en el accionariado.
  • Por tanto, habrá que volver a intentarlo con Santillana.
  • El fondo 3i quiere marcharse de la SER pero tampoco encuentra vendedor.

Definitivo: si Matías Cortés abandona el barco de la editorial Prisa -su Consejo de Administración, naturalmente- es que el barco se hunde sin remedio. Y es el que al que fuera principal asesor de Jesús Polanco no le gusta figurar entre los perdedores. Es también esa gran página informativa que es PrNoticias quien ha explicado el buen negocio que el progre Jaume Roures hizo a costa del progre Juan Luis Cebrián con los derechos del fútbol, cuando le tenía contra las cuerdas en los tribunales.

Y, como ya hemos recordado, el ceo de PRISA, Fernando Abril, recuerda a quien quiere oírle que si no se producen desinversiones están abocados al concurso de acreedores, una noticia que sería una auténtica conmoción.

La verdad es que cuando alcanzó una deuda de 6.000 millones de euros PRISA ya estaba en quiebra técnica, pero el apoyo de las instituciones y de la banca, que incluso, junto a Telefónica, aceptaron convertirse en accionistas del grupo, lo nunca visto, le salvó del desastre final.

Ahora mismo la situación es esta: una deuda que supera los 3.100 millones de euros y un buque insignia, el diario El País, que presentó un ebitda negativo de 55 millones de 2012.

Y lo que es más importante, la banca no puede seguir alimentando las pérdidas y buena prueba de ello, es que el BBVA de Francisco González ha decidido vender a fondos buitre los 300 millones de euros de riesgo que tiene con PRISA.

Pero hay más. Cebrián no consigue vender Santillana porque los bancos no quieren: ahora mismo representa el mejor aportador de fondos del Grupo, Como mucho, Alfaguara, pero eso no da para mucho. Tampoco Sogecable (a Telefónica y/o Berlusconi) porque el Gobierno se niega y la Comisión Nacional de la Competencia tampoco permitiría ese monopolio. Pero lo primero, el Gobierno. El pacto entre Soraya Sáenz de Santamaría, invitada por Juan Luis Cebrián a Bilderberg, está muerto: Rajoy no acepta lo que califica de "calumnias" de El País y la SER. La verdad es que cuanto más cae su cuenta de resultados, sus ventas y su influencia más se radicaliza PRISA, quizás para mantener dicha influencia.

Nadie quiere la SER, bueno Unión Radio. Y el fondo 3i quiere vender su participación en la cadena de emisoras, y no puede.

Pero lo más grave es que Telefónica y los tres bancos que más han apoyado a PRISA (entre ellos los españoles Santander y Caixabank) no están dispuestos a poner más dinero en el Grupo. Bastante tienen con intentar recuperar algo de lo que tienen.

PRISA está al borde del abismo. No ya por su deuda, que sigue siendo terrible, sino por su mermada, cada vez más, capacidad de generación de recursos. Y eso sí es definitivo.

Eulogio López

eulogio@hispanidad.com