Al parecer, los españoles figuramos a la cola en educación financiera. Y, al parecer, esto es muy preocupante. Lo he viso en la tele y yo también me he preocupado. Pero luego resulta que Shanghai figura a la cabeza de la lista en tan aconsejable disciplina y entonces me he tranquilizado. Dado el modelo de vida de Shanghai me he quedado tranquilo. Incluso sospecho que la mejor cultura financiera consiste en alejarse lo más posible de las finanzas. O, al menos, marcar la diferencia entre educación y formación. Educarse consiste en asimilar conocimientos, formarse consiste en aprovechar esos conocimientos para poder elegir entre lo justo y lo injusto y, si uno elige lo justo, ser feliz.

A continuación, me ha llegado la reflexión al respecto de Francisco González (en la imagen), presidente del BBVA, últimamente muy preocupado por la cultura y el conocimiento. Y lo ha clavado: FG ha mezclado educación y formación con la profundidad que le es propia. Es cuando ha asegurado que un elemento clave en dicha cultura consiste en la obligación de pagar las deudas. No ha especificado si se refería a los prestatarios del BBVA pero casi.

Si el ranking de cultura financiera lo encabeza Shanghai, a lo mejor no pasa nada porque los españoles viajemos en el furgón de cola

Divertir instruyendo, es nuestro lema. En efecto, un deber moral -formación- consiste en pagar las deudas. Mientras que la educación financiera del BBVA se plasma, como en cualquier banco, en proporcionar dinero a quien no lo necesita en condiciones claras para poder recuperar el capital prestado más los intereses, cuanto más mejor.  

Lo mejor que puede hacer FG es abandonar la Presidencia del BBVA para dedicarse a la docencia. En cátedra de educación financiera se entiende, dedicada a mejorar la cultura financiera de los empleados de banca, no de los clientes. Tengan en cuenta que FG podría enseñarles más de lo que deben saber. A los clientes, me refiero.

Dejémonos de tontunas: educación financiera -datos y conocimientos- no es otra cosa que la viejísima asignatura de matemáticas. El resto no es cultura financiera, es formación moral, catequética, que consiste en lo de siempre: darle a cada uno lo suyo y no estafar al prójimo. Todo ello derivado del séptimo mandamiento.

Pues de otra forma, ¿en qué va a consistir esa nueva asignatura escolar -o parte de una asignatura- que se anuncia bajo el pomposo nombre de cultura financiera En cualquier caso, FG ministro de Economía. Cuanto antes. 

Eulogio López

eulogio@hispanidad.com