• "No nos podemos quedar a la mitad del camino en materia económica y en seguridad", afirma el actual presidente, inmerso en negociaciones con las FARC.
  • Santos proseguirá sus negociaciones con los terroristas: "Nuestro mayor reto es que no haya más víctimas y para eso tenemos que continuar".
  • En materia económica, reconoce que la mitad de los colombianos siguen en la pobreza. 
El presidente de Colombia, Juan Manuel Santos (en la imagen), ha anunciado que se presentará a las elecciones presidenciales de 2014 para conseguir la reelección, el próximo 25 de mayo de 2014.

En Colombia, la reelección presidencial fue aprobada en el año 2004 por el Congreso de la República de Colombia, reformando así la Constitución del país. De hecho, Santos será el segundo presidente en ejercicio en aspirar a una reelección después de que lo hiciera su antecesor Álvaro Uribe Vélez, quien gobernó el país en dos periodos.

Santos ha insistido en varias ocasiones sobre la "importancia" de continuar "para terminar la tarea", lo que hace prever que éste pueda ser su eslogan de campaña, según ha informado el diario 'El Colombiano'. "No nos podemos quedar a la mitad del camino en materia económica y en seguridad", ha afirmado Santos, que insiste en que quiere "continuar liderando las grandes transformaciones que se han puesto en marcha".

En lo que respecta a la economía, Santos ha subrayado los logros en empleo: "Superamos la meta de crear más de 2 millones de puestos de trabajo, más que cualquier otro país" en Hispanoamérica. "Pero aún queda un número similar de desempleados". Asimismo, ha reconocido que la mitad de los colombianos siguen en la pobreza.

En cualquier caso, ha incidido en su lucha para mejorar la situación de los colectivos desfavorecidos. Así, ha concretado que durante la última legislatura "se está dando viviendas gratis a los más necesitados y se está llevando agua a los lugares más recónditos del país", según recoge la emisora colombiana Caracol Radio.

Y en lo referente a 'la seguridad', que también destacaba Santos, el actual presidente ha declarado que "optar por más años de dolor es una iniciativa inaceptable". "Nuestro mayor reto es que no haya más víctimas y para eso tenemos que continuar", ha dicho el nuevo candidato a la presidencia, pese a reconocer que esperaba que el proceso de paz avanzase más rápido. De todas formas, Santos ha defendido que se han conseguido "acuerdos importantes", ya que "la guerrilla anunció que se someterá a las reglas de la democracia".

Recordemos que desde el 8 de octubre y el 19 de noviembre de 2012 en Oslo y La Habana, respectivamente, Gobierno y FARC llevan a cabo un diálogo de paz basado en una agenda de seis puntos para poner fin a más de cinco décadas de conflicto armado, en las que han muerto 600.000 personas. El 28 de noviembre, en pleno proceso electoral, se retomarán las conversaciones en la capital cubana con los temas del narcotráfico y las víctimas como principales puntos de la agenda a tratar.

Los esfuerzos para llegar a la paz siempre son loables. Pero no a cualquier precio. Lo que hay que preguntarse con Santos es si ha concedido o va a conceder a los terroristas privilegios por dejar de matar. Porque eso es lo discutible desde un punto de vista ético, ya que entonces se legitima la violencia para conseguir objetivos políticos.

Dicho esto, la Iglesia colombiana apoya el proceso de paz, lo cual también conviene tenerlo en cuenta, pues ellos están ahí, en 'la frontera', como diría el Papa Francisco...

José Ángel Gutiérrez

joseangel@hispanidad.com