El viceministro de Asuntos Exteriores, en alusión a Israel y EEUU, rechaza "cualquier intento de resolver el conflicto militarmente"Este miércoles pasado informábamos del comienzo en Pekín de la cumbre de la Organización de Cooperación de Shanghai (OCS) con la asistencia de al menos siete Jefes de Estado -China, Rusia, Kazajistán, Kyrgistan, Tayikistán y Uzbekistán, y la asistencia del presidente iraní, Mahmud Ahmadineyad- y el objetivo de impulsar la cooperación en la seguridad y la economía regionales. Y señalamos que China, Rusia e Irán podrían erigirse como un contrapeso al eje atlántico formado por Europa y América en materia económica, política y militar.

Sin ir más lejos, y como apoyo a la tesis, el viceministro de Asuntos Exteriores chino, Chen Guoping, ha dicho -en una rueda de prensa en la cumbre OCS- que Irán tiene derecho a utilizar su energía nuclear de forma pacífica. Y, por su parte, el ministro ruso de Exteriores, Serguéi Lavrov, declaró ayer en Pekín que imponer sanciones a Irán -tal y como pretende EEUU- sería "contraproducente".

Eso, mientras Irán defiende el objetivo 'pacífico' de su programa nuclear, frente a EEUU, Israel y otros países de la comunidad internacional que creen que esconde fines armamentísticos. Razón por la que han promovido sanciones contra el régimen de Teherán, que Rusia y China se han encargado de anular utilizando su veto en el Consejo de Seguridad de la ONU.

¿Se vislumbra la creación de una nueva alianza contra Occidente?

Andrés Velázquez
andres@hispanidad.com